Partiendo de la idea de que alumnos de primaria aprendan y valoren el mundo del arte, primero deberan saber obserarlo, entenderlo y después valorarlo. Este camino es dificil, pero no imposible. Los adolescentes siempre han tachado a los museos de aburridos. Puede ser que en sus vidas, nadie les haya explicado lo emocionante y curioso que resulta lo que en los museos se encuentra o que nunca hayan tenido la curiosidad de aprender mas sobre estos.
Yo, como profesor, realizaría una visita al museo totalmente innovadora, en la que los alumnos fueran motivados para aprender y, sobretodo, disfrutar de la experiencia. Explicaría, previamente a la visita, unos consejos que deberían adoptar los alumnos en cuanto a comportamiento dentro del museo, como por ejemplo: en el museo se debe estar en silencio, estando en silencio puedes entender mejor las obras, que las obras siempre tienen un significado, una historia, algo que nos quieren decir con un simple dibujo, escultura y que ellos mismos lo deberan averiguar, mediante la observación.
Cada uno llevaría al museo su libreta y su bolígrafo para describir los tres cuadros que mas le han llamado la atención, el porque le ha llamado la atención y lo que ellos creen que significa cada uno. Por supuesto, deberán escribir el titulo del cuadro, el autor y el año. Ya en clase, cada uno saldrá a la pizarra y expondrá su trabajo, mientras, el profesor, apuntará en la pizarra todos los cuadros. Cuando terminen todos, cada uno dibujará en su blog de dibujo el cuadro preferido de los tres que eligió.
(Esta adaptación al museo considero que se podría hacer para 2º y 3er ciclo)
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